domingo, 27 de julio de 2014

Médicos rurales: De la historia de los médicos del rural ourensano (1900-1975) a "Diario de un médico de aldea" de André Soubiran

Hace unos días se celebró en la Facultad de Medicina de Santiago el acto de lectura y defensa de la tesis doctoral del médico ourensano Roberto Fernández Álvarez. La tesis se titulaba "EL MÉDICO, EL PACIENTE Y LA MEDICINA RURAL EN OURENSE (1900-1975)", y fueron  codirectores de la misma han sido los doctores Enrique Jiménez y David Simón.

Noticia en El Correo Gallego, 15 julio 2014
Pocos días después el doctor Fernando Ponte publicó una columna ("Héroes anónimos") acerca de este trabajo de tesis y del mundo de los médicos rurales de Galicia. Reproducimos a continuación el trabajo que se publicó en "El Correo Gallego" (20 de julio de 2014):

  • FERNANDO PONTE
  • La historia, emocionante y sacrificada, de docenas de médicos casi anónimos que, con sus carencias y defectos, se dejaron, en su mayoría, la piel y la vida, para hacer lo posible por sus semejantes, es el itinerario por el que nos conduce la obra: El médico, el paciente y la medicina rural en Ourense (1900-1975). La Galicia pobre, profunda y dispersa es el escenario natural en el que se movieron estos profesionales. En particular hasta 1960, en que el desarrollo económico empezó a cambiar muchas cosas.
  • Su objeto de trabajo, una población casi siempre paupérrima, desnutrida y carente de lo que hoy consideramos más elemental para calificar una vida como mínimamente digna. Medios del todo precarios, pocos medicamentos, dinero casi inexistente, a tal punto que muchos pagos se realizaban en especie, generalmente medidas de grano; y alimentación carencial, monótona e insuficiente, de la cuna a la tumba. Recorrido este, con frecuencia, mucho más corto que ahora. Todo aderezado con epidemias, supersticiones y curanderismo.
  • Sus medios, un maletín con fonendoscopio, termómetro, tensímetro y medicación elemental de urgencia. Su entorno, una sociedad profundamente desigual, con gran diferencia de oportunidades entre unos pocos privilegiados y la gran masa anónima, agrícola y ganadera, emigrante y sufriente, con una altísima tasa de mortalidad infantil y maternal. Su medio de locomoción: el caballo, la bicicleta, la moto o el esforzado coche de San Fernando, un rato a pie y otro andando, por esos caminos dejados de la mano de Dios.
  • Ejercían en viviendas que hoy no pasarían una inspección como casetas, durmiendo a veces en fallados o sobre la cuadra, atendiendo partos a la luz de una vela, en medio de un temporal invernal propio de la tierra. Esta tesis doctoral, leída y defendida hace unos días, es un excelente, detallado y bien documentado recorrido, de sólida investigación, por esos años, que relata situaciones, espeluznantes muchas veces, tragicómicas otras y, picarescas, de ópera bufa o francamente jocosas, las menos, sin duda.
  • Contrastan poderosamente las penalidades a que hubieron de enfrentarse pacientes y médicos de entonces, con las exigencias y, perdóneseme el neologismo, tiquismiqueces, con las que hoy enredamos unos y otros, con frecuencia, como niños mal criados y demandantes.
  • Su autor, el ya Doctor D. Roberto Fernández Álvarez, médico de Familia en el C. S. de Allariz, dirigido sabiamente por los Dres. E. Jiménez Gómez y D. Simón Lorda, mereció la máxima calificación por este extenso trabajo que instruye, informa, desazona y hace meditar al lector. ¡Enhorabuena, Roberto!



A propósito del libro "Diario de un médico de aldea" de André Soubiran 

 Dibujo de la portada del libro "El gran oficio. Diario de un médico de aldea" (1956, ed. española), de André Soubiran.
Este dibujo/caricatura sobre un médico rural ilustra/adorna la portada del libro "El gran oficio. Diario de un médico de aldea" (1956, primera edición en castellano, Edic. Luis de Caralt).
Fue escrito por el médico francés André Soubiran.


"Diario de un médico de aldea" es el tercer tomo de la serie "Los hombres de blanco".
Fueron una serie de cinco novelas escritas entre 1947 y 1975, algunas de las cuales fueron premiadas, y que fueron editadas y reeditadas en diferentes idiomas y países. La dos primeras se titularon "Tú serás médico" y "La noche del baile", fueron un gran éxito de ventas cuando fueron publicadas. Hubo también varias películas sobre esta serie de libros.

De la serie "Los hombres de blanco" (de los 3 primeros volúmenes) se hicieron varias tiradas en España y Argentina. 
Algunas de ellas fueron ilustradas por famoso dibujante Lorenzo Goñi (1911-1992). No hemos logrado confirmar si los dibujos de portada y sobreportada del libro y de los dos que están al lado de este comentario libro son realmente de Lorenzo Goñi. 
Tuvimos la suerte de toparnos con ellos en una visita a un rastrillo de REMAR situado cerca del Hospital de Ourense hace unos días. Adquirimos los tres libros por 2 euros. Pensamos pertenecían a la biblioteca de un conocido ginécologo ourensano pues su nombre figuraba en muchos de los libros del estante en donde nos esperaban los ejemplares de "Los hombres de blanco".Todos ellos son de la edición de Luis de Caralt, 1953.

SOBRE ANDRÉ SOUBIRAN (1910-1999):

Nacido en 1910 en París, André Soubiran pasó su juventud en Toulouse, donde comenzó a estudiar medicina completó en la capital en 1931. Hizo su doctorado en 1935 con una tesis sobre el famoso filósofo y médico árabe Avicena. Movilizado en 1939, hizo la campaña de Francia en un batallón de carros blindados, y escribió luego un libo sobre su experiencia. Entonces comenzó un vasto fresco de la vida médica "Los hombres en blanco"(La Noche del Baile, Tú serás médico, El gran oficio, Un gran amor, Testimonio, Adiós, Dr. Roch, 1947-1958). También escribió libros sobre temas de historia o de actualidad como por ejemplo "La isla de los locos", que describe el mundo de los manicomios. Dos veces ganador de la Academia Nacional de Medicina, André Soubiran fue presidente de varias sociedades médicas y el Colegio Internacional de Cirujanos. Fuente: Le Livre de Poche, LGF








        "Hombres de blanco" - Película Póster por Ralph Habib - 1955  


Otros enlaces sobre la obra de André Soubiran y sobre médicos rurales en Francia:

  • Thierry Fillaut. Image de la médecine rurale et médicalisation des campagnes dans les années Cinquante et Soixante. L'exemple de la Bretagne. Sociétés & Représentations, 2009/2 (n° 28), 135-151. (ver)

Ill  3
« Journal d’un médecin de campagne », reportaje fotográfico acerca de la vida de un médico rural en Nivernais, La France à l’heure des choix : médecine et santé. Les Cahiers français, n° 142, mai-juin 1970, pp. 12-15 (tomado de http://www.cairn.info/zen.php?ID_ARTICLE=SR_028_0135#s1n4)


Del año 1953, del mismo año en que se publica en España el "Diario de un médico de aldea" de Soubiron es este reportaje realizado en Francia . Según la ficha del reportaje "Un médecin de campagne":
"Informe dedicado a los médicos rurales: uno primero sigue a cualquiera de ellos en su gira de bicicleta de enfermos de granja en granja y de los veterinarios con los que él habla de las enfermedades comunes a los animales y los seres humanos, tales como la tuberculosis. En la segunda parte, este médico es entrevistado por Pierre Dumayet con quien discute la diferencia entre la medicina y las poblaciones rurales, la gente mala de la dureza del país, la relación entre los médicos y curanderos, remedios populares son a menudo la fuente de los grandes descubrimientos médicos.

miércoles, 23 de julio de 2014

LIBRO "Razón, locura y sociedad. Una mirada a la historia desde el siglo XXI"(2013, Ed. AEN)




Razón, locura y sociedad. Una mirada a la historia desde el siglo XXI

Autor: D. Simón Lorda, C. Gómez Rodríguez, A. Cibeira Vázquez, O. Villasante (eds.)
Año: 2013.
Número en la colección: 51.
N. Páginas: 608
Tamaño: 20,5 x 13,5 cm.
Ilustraciones: Sí.
ISBN: 978-84-95287-69-4
Índice:
Los autores
Prólogo/Introducción
Literatura y psiquiatría
-La función paterna en el Quijote, Valentín Corcés Pando
-El instinto de muerte de R Novoa Santos. Acerca de la muerte, el suicidio, la eutanasia y el derecho a decidir sobre la propia vida, Federico Menéndez Osorio
-Enfermos y sanadores en la obra de Cunqueiro, Ángel Vázquez de la Cruz
-Sustancias narcóticas y alucinógenas en los textos cervantinos, Francisco López-Muñoz, Cristina Andrade-Rosa, Pilar García-García y Cecilio Álamo
-La psicología imaginal como herramienta de análisis de la obra narrativa de Gustavo Adolfo Bécquer, Julio Zarco Rodríguez, Celia Rodríguez Varela y Ana Suela Martín
-El “ánima” en la obra narrativa de Gustavo Adolfo Bécquer, Julio Zarco Rodríguez, Celia Rodríguez Varela y Ana Suela Martín
Holocausto, memoria, medicina y psiquiatría en el nazismo
-Holocausto: una reflexión desde la medicina, Esteban González López
-El papel de la psiquiatría y la psicofarmacología en los abusos médicos cometidos durante el III Reich, Francisco López-Muñoz
-Primo Levi, testimonio del holocausto y suicidio, Adrián Gramary
Razón, Locura y Ciencia psiquiátrica
-«Las Tres Grandes» de Villalobos. Psicología médica en la corte del Rey Católico, Paloma Alonso Quintanilla, Begoña Cantero Fernández, Ramón Esteban Arnáiz
-De la locura como exceso a la locura como enfermedad, Josep Mª Comelles Esteban
-Un mundo degenerado: sucesos y miserias de los psiquiatras portugueses del siglo diecinueve, Manuel Curado
-Pseudoalucinaciones de Victor Kandinsky, Ekaterina Kokoulina y Tiburcio Angosto Saura
-La larga noche de la neurociencia soviética bajo el estalinismo, Miguel Marco Igual
-La aportación de Jaime Vera I López al diccionario enciclopédico hispano-americano de Montaner y Simón (1887-1890), AntonioRey González y Enric Jordá Moscardó
-La feminización de la locura: aproximación histórica al concepto de distimia, Celia García Díaz, Daniel Gutiérrez Castillo y Laura López Alonso
-Las dificultades para la investigación científica en la España de la primera mitad del siglo XX. El caso paradigmático de un psiquiatra de prestigio: Román Alberca Lorente (Alcázar de San Juan, 1903 - Murcia, 1967), José Miguel Sáez Gómez, Pedro Marset Campos,Enrique Aguinaga Ontoso y Carlos López Fernández
-Marginación de los científicos en el franquismo: Luis Valenciano Gayá (Murcia, 1905 - 1985), Cesáreo Cerón González, Pedro Marset Campos, José Miguel Sáez Gómez, Carlos López Fernández y Enrique Aguinaga Ontoso
-A psiquiatría forense no Chicago dos anos 20. O caso Leopold and Loeb, María José Louzao Martínez, Miguel Angel Miguélez Silva y Tiburcio Angosto Saura
-La paranoia reformatoria y la «Névrose Révolutionnaire» en el siglo XIX. Estudio psiquiátrico de Olympe de Gouges, según el texto de Alfred Guillois, José Luis Día Sahún y Laura Día Guillén
-First impressions of Haloperidol in Portugal (1959), Rubén Gaio, João Rui Pita, y Ana Leonor Pereira
-Hipnosis, cocaína, electricidad y otros anestésicos en odontología. Su uso en Galicia en el siglo XIX y principios del XX, María Carmen Leira Abella y María Ángeles Cano Leira
Instituciones psiquiátricas, Razón, Locura y Sociedad
-De visita por los manicomios con la prensa escrita y gráfica de finales del XIX y principios del XX, Oscar Martínez Azumendi
-Primeros intentos de profesionalización de la enfermería psiquiátrica: de la Segunda República a la Posguerra Española, Olga Villasante
-Comparativa entre “las mujeres” ingresadas en la beneficiencia y “las señoras” del Hospital Privado Sagrado Corazón: nuevas terapéuticas a principios de s. XX en Málaga, Celia García Díaz, Laura López Alonso y Daniel Gutiérrez Castillo
-El Centro Hospitalar Conde de Ferreira a través del trazo biográfico de sus pacientes: un fragmento de la historia de la psiquiatría en Portugal, Bruno Ribeiro, Orlando von Doellinger, José Manuel Romero y Adrián Gramary
-Degeneracionismo y “escritura” en el manicomio de Leganés, Ruth Candela Ramírez y Olga Villasante
-Locura escrita: cartas y dibujos de los alienados en el Manicomio de Santa Isabel de Leganés (1939-1952), Ana Conseglieri Gámez
-Manuel Peraita Peraita: Director Facultativo del Manicomio de Santa Isabel de Leganés (1944-1950), Ana Conseglieri Gámez
-Sobre “baños tibios prolongados”, balnearios y locura en Galicia (finales del siglo XIX y primeros años del siglo XX), Tatiana Bustos Cardona, David Simón Lorda, Xaqueline Estévez Gil y Claudia Ximena Muñoz
Cultura, Razón, Locura y Sociedad
-La Psiquis, periódico del Bello Sexo (Valencia, 1840). Una empresa protofeminista llevada a cabo por hombres, Cándido Polo Griñán
-Los demonios de Loudun, Marta González Rodríguez, Elena Fernández Rodríguez y Laura López López
-La “Espiritada” de Moeche, Miguel López López, Amirashkan Espandian, Luis Delgado Charro y David Simón Lorda
-Antón Moreda, Jorge Luis Begazo Salas, Laura López López y Elena Gato Gómez
-Psiquiatría y cine en España durante la dictadura franquista (1939-1975), María Herrera Giménez, Pedro Marset Campos, Carmen Llor Moreno, Isabel Muñoz González y Joaquín Cánovas Belchí
-Psiquiatría y cine en España durante la Transición (1975-1982), María Herrera Giménez, Pedro Marset Campos, Carmen Llor Moreno, Isabel Muñoz González y Joaquín Cánovas Belchí
-Tras la pista del pintor Daniel Urrabieta Vierge (de Compostela y Conxo a La Salpêtrière pasando por El Quijote), Xaqueline Estévez Gil, David Simón Lorda y Tatiana Bustos Cardona
Guerra Civil, memoria histórica y salud mental
-1937, Episodios nacionales: asesinatos en el psiquiátrico de Valdediós (Asturias), Iñaki Markez
-La Guerra Civil en el Hospital Psiquiátrico de Leganés, Paloma Vázquez de la Torre
-Guerra Civil y locura en Galicia (narrativas de Francisco y de su padre), Emilio González Fernández y David Simón Lorda
Reformas psiquiátricas en España: una mirada desde el siglo XXI
-Tradición y cambio en la atención a la Salud Mental en Galicia y España (1970-2012), Fernando Márquez Gallego
-Andalucía. “La Culminación de la Contrarreforma…entre polvos y lodos”, Onésimo González Álvarez
-Galicia: del traslado a la reforma. Toén: la historia se repite…muchos años después, Chus Gómez Rodríguez, Alcira Cibeira Vázquez, José Antonio Campos Pérez, Yolanda Castro Casanova, Luis Rodríguez Carmona
-El hospital psiquiátrico de Castro: particularidades de la reforma psiquiátrica en el s XXI, Elena Gato Gómez
-La psiquiatría de Lugo: desde el hospital psiquiátrico hasta la actualidad, Luis Cleto González Domínguez-Viguera, E. Fernández Rodríguez y Jorge Luis Begazo Salas
-15-F, Beatriz Rodríguez Paz, Eva Álvarez Martínez y Luis Vila Pillado.
Homenaje al Prof. Delfín García Guerra (historiador de la Medicina y de la psiquiatría española y gallega)
-Delfín García Guerra: un encuentro con el Catedrático de Historia de la Medicina de Santiago, Emilio González Fernández
-Una danza de la muerte al servicio de la vida. Luis Montiel Llorente
-El Mal de la Rosa: una biografía, José Luis Peset
ANEXOS
- Programa y fotos de las jornadas.
---------------------------------------------------------------------------------------
Se puede adquirir a través del enlace a la Tienda Online de la Asociación Española de Neuropsiquiatría
http://www.tienda-aen.es/component/virtuemart/?page=shop.product_details&flypage=flypage.tpl&product_id=164&category_id=8

-------------------

UNA RESEÑA DEL LIBRO en la revista de la AEN. Autor: Mariano Hernández Monsalve: ver en enlace: http://www.revistaaen.es/index.php/aen/article/view/16831/16701

miércoles, 16 de julio de 2014

Historias de ida y vuelta desde el exilio republicano en México: El Dr. Antonio Fernández Bouzas, el fotógrafo de interiores

Tuvimos hoy noticia de la iniciativa "Mapa colaborativo del Exilio español en México", organizado por El Centro Cultural de España en México (CCEMx) junto con Escoitar y  GPS Museum en el marco de las diferentes actividades organizadas para el Programa 75 años Exilio español,  en conmemoración del fin de la Guerra Civil española.

Desde el blog felicitamos a los organizadores y no nos resistimos a aportar algunas Stories de ida y vuelta del exilio ourensano-gallego en México que teníamos en modo "borrador" en nuestro blog.

DE "POR LA LIBRE" A "MI PADRE": Historia e historias de los médicos mexico-ourensanos Fernández (Fernández Carnicero y Fernández-Bouzas)
A pesar de ser primos de más o menos la misma edad, Rocco y Rodrigo no se soportan. Lo único que los une es su afecto incondicional hacia su abuelo, don Rodrigo Carnicero, un médico nacido en España quien adora a sus nietos y se siente decepcionado de sus propios hijos. La muerte del abuelo y la promesa de arrojar […]Supimos de la película "Por la libre" (2000, México) gracias al doctor José Luis Díaz (neurocientfífico mexicano y miembro de la Academia Mexicana de la Lengua). Durante su breve estancia en Ourense para presentar su libro (Sementeira e memoria)  hace unos años, nos habló de esta película, que con guión de Antonio Armonía hacía referencia a un exiliado español en Mexico llamado Carnicero. 
El prestigioso guionista mexicano Antonio Armonía (Antonio Fernández Harmony), es nieto del médico ourensano exiliado a México en el verano del 36, Antonio Fernández Carnicero, y precisamente traía a la trama de "Por la libre" algunos de sus referentes familiares. Es una película que es una roadmovie de adolescentes actuales descubriendo la vida pero también algunos fantasmas y demonios personales y familiares.

https://www.youtube.com/watch?v=xCBftnFh6lM

http://www.peliculasmas.com/drama/10952/ver/por-la-libre-2000.html/


Hace poco descubrimos en Internet una entrevista con Antonio Armonía, en donde el nieto guionista mexicano continúa elaborando parte de su historia familiar. Ahí hace referencia a un proyecto sobre su abuelo y su padre, el también médico Antonio Fernández-Bouzas, pero en el cual no estamos ante una historia hagiográfica acerca del exilio sino ante una dura historia de violencia intrafamiliar. El proyecto de película se titula "Mi padre" y arranca desde al menos 2008 (ver algunas referencias en prensa). 

  • "Antonio Armonía platica sobre su acercamiento a la lectura y cómo ésta parte de su infancia lo condujo por el camino a la escritura, siendo miembro de una familia que siempre se ha involucrado en el arte, los treinta mil tomos que lo acompañaron en su infancia y juventud fueron determinantes para desarrollar su imaginación, apartándolo del gusto por la televisión.
  • Su trayectoria lo ha formado y reforzado como dramaturgo y guionista cinematográfico, algunos proyectos en los que ha participado son las películas "Por la libre" y "Morirse en domingo". Autor de "El Manual de la Manuela" el arte de masturbarse.
  • Actualmente trabaja en un proyecto español con gran significado sentimental, contado por su padre sobre su abuelo y escrito por él, en parte tributo a Cervantes, "El Quijote", libro que leyó su abuelo mil veces durante su vida.
  • Platica también sobre el nuevo género cinematográfico que están por iniciar, llamado "Realismo Extremo" aplicando la metafísica bajo el respaldo de uno de los grandes exponentes de dicho tema en la actualidad". 
  • Es una entrevista realizada por David Ladrón de Guevara en la Casa Fortaleza de Emilio "El Indio" Fernández, y publicada el 9/01/2014:Ver en http://www.youtube.com/watch?v=6W050SyUOlI 

Esta entrevista deja entrever una historia compleja, que está reescribiéndose/reformulándose, y que al menos compete a tres generaciones de esa familia Fernández Bouzas que se exilia a México a raíz del inicio de la Guerra Civil en España. 
El médico alaricano Antonio Fernández-Bouzas, y padre de Antonio Armonia, emigra por motivos políticos a México cuando tenía 4 años, en compañía de su madre, la maestra alaricana María Bouzas y de su hermano Roberto. Todos van a encontrarse con el cabeza de familia, el médico Antonio Fernández Carnicero, quien había salido exiliado de Ourense-España un año y medio antes debido al riesgo que corría su vida dada su militancia política en el Partido Comunista y la represión feroz y cruel desatada en Galicia por los sublevados fascistas (ver web http://vitimas.nomesevoces.net/en/).
El Dr. Antonio Fernández-Bouzas desarrolla toda su vida profesional como médico e investigador en neurodesarrollo, neurociencia y neurobiología en Cuba y en México (en el Instituto de Neurobiología de la Universidad Nacional Autónoma de México UNAM en el campus Juriquilla, Querétaro)Es una figura que había permanecido con una trayectoria borrosa y desconocida para la medicina y la sociedad ourensana. En una búsqueda de sus trabajos nos salen mas de 58 publicaciones y 528 citas.
Quisimos saber algo mas de este médico ourensano-mexicano, y es ahí cuando en nuestra búsqueda por Google descubrimos que el Dr. Antonio Fernández Bouzas había fallecido en Septiembre de 2013.

"Fernández Bouzas: “El Fotógrafo de Interiores”".
Así se titula el precioso texto de homenaje que Antonio Armonía dedica a la memoria de su padre, el Dr. Antonio Fernández Bouzas, y que fue leído en un acto que organizó el  Instituto de neurobiología de la UNAM como homenaje al médico fallecido . 



Antonio Fernández-Bouzas (en el centro con barba blanca)


In memoriam del radiólogo Dr. Antonio Fernández Bouzas
por Antonio Armonía
http://www.inb.unam.mx/historias_noticias/2014/historia_drfdzbouzas.pdf
Enero 28, 2014
"En una biografía que escribí con mi padre sobre su vida y la de mi abuelo, traté de sintetizar la vida de mi papá desde un punto de vista objetivo y profesional, pese a que nunca se puede eludir el comentario personal. Ahora hablaré desde el punto de vista más subjetivo de todos: la amorosa mirada filial, no exenta de humor negro; a lo que seguramente Bouzas diría: “¿Y es que hay otro humor?”
No existe nada más fácil, ni más difícil a la vez, que escribir sobre una persona a la que se ama incondicionalmente. Por un lado, la persona que escribe se exige así mismo tanto cuanto ama y siempre queda la sensación de que las palabras no alcanzan a expresar ese amor en toda su extensión y desmesura. Así que lo mejor es quitarse de exigencias y dejar que hable el amor.
Sus grandes amigos, entre los que se cuentan varios de sus ex alumnos, hablan mucho de sus logros académicos y pedagógicos, pero como hijo considero que su logro más importante ha sido ser una buena y finísima persona, además de un gran y peculiar padre. Un hombre digno y cabal que siempre se preocupó más por ayudar a los otros que a sí mismo. Un hombre libre de convencionalismos sociales; enemigo de jerarquías y tratos preferenciales, siempre trató a propios y extraños con exquisita cortesía y afabilidad; refractario a toda forma de dogmatismo, menos al ateísmo que profesa; libre de prejuicios, salvo los razonables como contra el nazismo y los políticos mexicanos; jamás rindió pleitesía a nadie ni a nada sino a la virtud y al virtuosismo representado en la ciencia y en el arte. Adoptó la ética como credo y modo de vida. Hay que hacer lo correcto, aunque redunde en tu perjuicio. Valiente hasta el extremo de la demencia y defensor incondicional de todos los débiles, desamparados y oprimidos. Y pese a que vivió bajo los preceptos de los viejos filósofos griegos, su etología se aproxima más a la del Quijote. No en balde era su libro favorito. Y su carácter obstinado, terco y pertinaz, gallego al fin, encaja mejor en el patrón del desquiciado campeón de los débiles y desamparados que en el de un viejo contemplativo y preguntón como Sócrates.
Mi padre nunca se vio a sí mismo como médico, sino como un artista de la medicina, del mismo modo en que la concebían los griegos. Desde que yo recuerde, siempre se definió, no como radiólogo, sino como “fotógrafo de interiores”. Pero también veía la medicina como el arte de la anormalidad o de la anomalía por ponerlo en su fraseología particular. Apreciaba la belleza intrínseca de lo anormal, lo que Celine llama “la belleza de la fealdad”. Al grado que materializó ambas pasiones, medicina y arte, al combinarlas en una exposición que montó en el hospital Carlos J. Finlay con radiografías de plantas y seres humanos, y sus anomalías, intervenidas con dibujos a color y dibujos rayados sobre la placa de acetato, cuyo título creo recordar fue el de “Fotografía de interiores”.
Una faceta preponderante de su carácter es su fatalismo gallego, que no pesimismo como algunos creen. No es pesimista, pero tampoco optimista. Se podría decir que es un grado intermedio entre ambos, más cercano a la realidad que al idealismo. Su pesimismo es más bien realismo gallego que se contiene muy bien en el axioma: “Vivir es una mierda, pero morir es peor”, y si murió no fue por averiguarlo, se los aseguro. Por esta razón no le gustan sus cumpleaños, ni a nadie razonable agregaría yo, no por miedo a la muerte, sino por amor a la vida, y por un rechazo natural y comprensible a envejecer y a morir.
Siempre se ha vanagloriado de ser “ateo por la gracia de Dios”, al extremo de negar la probabilidad matemática de la existencia de Dios siendo científico. Con el paso de los años han crecido mis dudas sobre su ateísmo por la religiosidad con que lo profesa. Tanta vehemencia en negar redunda en una afirmación del concepto, pero no de la existencia. Sin embargo, su encono contra la religión no se asienta en una base ideológica o política, sino que parte de su negación a reconocer y a aceptar la existencia de un Ser superior al hombre, por su amor ilimitado a la humanidad y por lo defectuoso de la creación divina, que él habría mejorado de haber tenido la posibilidad.
Sin embargo, en sus momentos de irracionalidad, cada vez más raros en su vejez, le afloraba una veta hinduista en la que dotaba a los objetos de consciencia y voluntad. Me explicaré con una anécdota de Cuba. Cada vez que el Skoda (coche fabricado en Checoslovaquia) nos dejaba botados, lo cual ocurría a menudo, se enfurecía, se apeaba y le gritaba al coche: “¡Arranca cabrón o te doy una hostia!” Ante la checa reluctancia del coche a arrancar, le arreaba sus buenos madrazos. Luego mi madre le recriminaba: “¡Pero mira cómo dejaste el coche Toño!” “El cabrón no quiso arrancar”, respondía él con toda naturalidad. Y si eso no es animismo, yo no sé qué es.
En gran medida, yo soy un producto de su educación esotérica y divertida. Nos enseñó lo más florido del lenguaje callejero, todas las malas palabras, y lo más excelso de la poesía española y de otras literaturas, particularmente la norteamericana y la cubana. Yo lo acompañé muchas veces a la UNEAC donde se reunía con escritores cubanos a departir, entre ellos Lezama Lima y Jorge Onelio Cardoso. Recuerdo que el café que servían era muy bueno, aunque no me acuerdo de nada más.
De los recuerdos más vivos de mi temprana infancia emerge el olor particular de los teatros: a alfombra y telones húmedos, afeites, madera vieja y enmohecida. Esos recuerdos se los debo a mi padre. Cuando empezó a escribir, actuar y montar obras de teatro en el hospital Carlos J. Finlay en La Habana, yo tenía cuatro años. Varias veces a la semana yo lo acompañaba a los ensayos que eran en las noches y me quedaba dormido en las butacas viéndolo actuar y dirigir a la vez sus propios textos. Casi por obligación estaba constreñido a escribir teatro político con una marcada influencia del teatro clásico griego y de Brecht. Ganó varios premios nacionales de teatro con sus montajes en Cuba durante los años sesenta.
De ahí viene mi vocación dramatúrgica y dramática. Desde niño me introdujo en el teatro clásico, me hizo leer a Brecht y a Beckett; sus admiraciones, entre muchos otros. A la edad de siete años me llevó a ver “Un perro andaluz” de Luis Buñuel. Tuve pesadillas por varias semanas, por el ojo cortado del inicio, pero le agradezco las pesadillas infinitamente por haberme dado otra influencia definitoria en mi vida. Fuimos cientos de veces al cine juntos; otro espacio que nos pertenece por derecho de uso, así como el teatro. Pero no sólo nos llevaba a mi hermana y a mí; arramblaba con toda la pandilla de la cuadra. Y los domingos nos llevaba a todos a la playa. Eran playas que distaban 40 minutos de La Habana. Llegamos a ser catorce niños en un VW. Uno de ellos, mi hermano cubano, Héctor Gómez de As, apodado Tico, lo empezó a llamar “el Bouzas” por amor, y así se le quedó.
Defendía sus prejuicios, nacidos de una bondad natural, hasta el extremo del ridículo y con la vehemencia de un Quijote obcecado por el bien y la justicia. En un partido de fútbol entre Checoslovaquia y Alemania, Tico y yo le íbamos a los alemanes y mi papá a los checos; “jamás a los nazis”. Ganó Alemania y se puso tan furioso que rompió una puerta, porque “todos los alemanes son unos nazis de mierda”. Cuando mi madre le dijo: “Son alemanes de la República Democrática Alemana, Toño”, respondió airadamente: “¡Nazis comunistas, coño!”
No obstante, supo hacer de su principal defecto, la extrema violencia, una virtud; pues siempre la ejerció contra el abuso en cualquiera de sus manifestaciones, y para defenderse a sí y a otros. A pesar de haber sido un niño muy maltratado por su padre, jamás nos puso un dedo encima, ni a nadie que él quisiera. Por el contrario, ahí donde hubiese una situación de abuso de cualquier tipo, mi padre intervenía como campeón de los ofendidos: un Quijote redivivo. Ni jamás agredió a nadie sin ser agredido previamente.
Y aunque nunca comenzó una bronca, sí las acababa todas, ¡y de qué manera! Cuando se enfadaba conmigo, lo cual no le costaba ningún trabajo, Bouzas dirigía su violencia contra los objetos; lo cual, lejos de impresionarme, me resultaba cómico, porque sabía que era su manera de descargarse. Y llevó su virtuosismo de la violencia al grado de escribir un guión conmigo donde se muestra tal como es, sin melindres ni escrúpulos, con una franqueza y un valor admirables que elevan su autoridad ética y moral muy por encima de su defecto.
El guión titulado “Mi padre” justamente versa sobre la conflictiva relación con su padre que lo masacró a golpes. Si al principio se resistió a contarme, “con el trabajo que costó olvidarlo, no me jodas”, finalmente lo persuadí de que era necesario que comprendiéramos la etiología del patrón del abuso físico para poder romper con la cadena de violencia dentro de la familia, porque aunque él no nos hubiese pegado, sí había puesto un ejemplo de violencia, por lo cual yo era violento. Y para poder romper la cadena de violencia y hacer que mi hija fuese un ser totalmente pacífico, necesitaba comprender el origen de la violencia en nuestra familia para extirparlo. Además de que la colaboración nos acercaría aún más y el ejercicio le serviría para trabajar sobre ese aspecto negativo, el único diría, de su carácter.
Mi padre siempre me alentó a la experimentación, a salir de la vorágine de la reiteración. No me educó para que escribiera buen cine nada más, sino para que inventara nuevas maneras de escribirlo como una vez me dijo. Así que nos inventamos un nuevo estilo cinematográfico que se adecuara a las características del relato mnemónico, un realismo a ultranza, al que llamamos “realismo extremo”, emparentado con “el conceptismo tan español” como dijo Borges de Unamuno, otro devoto de El Quijote; autores todos caros a Bouzas y a mí.
La idea lo entusiasmó y emprendimos la escritura del guión que se sigue reescribiendo como la vida misma. Todos los conocedores del oficio que han leído el guión admiran la valentía y la honestidad de mi padre, pero más de admirar es el trabajo emocional y conductual realizado por nosotros, al haber logrado erradicar la violencia del núcleo familiar; sus nieta, Rita, es una pacifista, al extremo de negarse a pegarles a las piñatas. Le parecía un acto de auténtico salvajismo.
Pocos padres se hacen acreedores de una película inspirada en su vida y no conozco otro que se haya sentado con su hijo y le haya abierto el corazón con tal franqueza. A mi padre, a mi esposa Mónica y a mi hija Rita les debo la vida. A él le hago la película como homenaje a su paternidad y se la dedico a mi esposa recientemente fallecida y a mi niña, porque mi hija, mi esposa y mi padre han sido y son los seres de mi vida. Te amo papito, y te extraño…" (tomado de http://www.inb.unam.mx/historias_noticias/2014/historia_drfdzbouzas.pdf
Enero 28, 2014).



"La comunidad del Instituto de Neurociencias de la Universidad de Guadalajara lamenta profundamente la sensible pérdida del Dr. Antonio Fernández Bouzas, investigador de la UNAM, quien fuera cercano colega y colaborador de nuestra institución. México, Cuba y España pierden a un profesor incansable, devoto atleta de las artes marciales, culto y lúcido investigador, comprometido amante de la Radiología y otros medios de imagen, autor de innumerables contribuciones científicas, pero sobretodo, a un padre dedicado y generoso amigo. Descanse en paz, Maestro!" (tomado de http://www.ineuro.cucba.udg.mx/articulo.php?id=152)


ESPEREMOS QUE PRONTO PODAMOS VER EL FILME "MI PADRE" DE ANTONIO ARMONÍA Y CONOCER ALGO MAS DE ESTAS HISTORIAS DEL EXILIO, HISTORIAS DE IDA Y VUELTA.


Foto del médico ourensano Antonio Fernández Carnicero en México, años 40. (arch. familia). Médico exiliado en 1936 y activo militante del Partido Comunista en Ourense hasta el inicio de la Guerra Civil. En uno de los números de la revista "Cadernos de Atención Primaria" (2010) en el trabajo "Os nomes do exilio (médico, republicano, galego)".




----------
ALGUNOS ENLACES SOBRE ESTAS STORIES:

  • http://diariodeunmedicodeguardia.blogspot.com.es/2009/10/el-colectivo-redes-escarlata-rindio.html
  • http://diariodeunmedicodeguardia.blogspot.com.es/2010/10/libros-medicos-magos-articulo-de-fermin.html
  • http://diariodeunmedicodeguardia.blogspot.com.es/2011/12/los-nombres-del-exilio-os-nomes-do.html
  • http://diariodeunmedicodeguardia.blogspot.com.es/2011/11/o-incio-lugo-recuerda-su-medico.html




-

miércoles, 2 de julio de 2014

Por los planaltos y montañas de la Portilla da Canda, Barxacoba y Pías (Zamora)...(y con algunas "stories" de médicos, practicantes y maquis)

Al fondo cumbres de Cruz de la Mata y Pedra do Bedul-. Planaltos en las montañas de la zona de Barxacoba camino de Val(Zamora), junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)


Anduvimos hace unos días por los planaltos de las sierras que hay al norte de la portilla de la Canda, en el linde entre Ourense y Zamora...Recorrimos y pateamos cresterías y lombos situados por arriba de los pueblos de Pías, Barxacoba...Tierras míticas para los de la redacción de "Diario de un médico de guardia"... Es el  "Territorio Brumoso" (así lo llama el escritor Xavier López Rodríguez)... Una zona llena de historias (y rastros) de lobos, de pastores, de ganado en el monte, de invernías temibles, de médicos y practicantes a caballo, y de fuxidos y guerrilleiros antifranquistas. 
Por aquí venían los senderos y corredores de montaña que recorrían los de la guerrilla buscando la seguridad de la cercana frontera portuguesa de la zona de A Mezquita o de Hermisende. Venían desde la llamada "Cidade da selva", en los montes de Casaio en Peña Trevinca, en donde se hicieron fuertes y resistieron hasta finales de los años 40. 
En esta zona se movían y operaban varios grupos de maquis. De uno de ellos formaba parte Cándido Losada "Malvavisco" (socialista, de A Villavella- A Mezquita-Ourense), y cuya memoria oral recogió en varias cintas de cassete el investigador etnógrafo de la zona, Xosé Rodríguez Cruz. Las entrevistas, que contienen muchas stories de la guerrilla de la zona, fueron realizadas en la casa del antiguo guerrilleiro, en  A Vilavella. Merecerían ser editadas y publicadas.
Médicos de la zona en los años de la Guerra Civil fueron el Dr. Manuel Fábrega Coello (médico de Lubián y fusilado por ayudar al general republicano Caminero y del que ya hemos hablado en otras entradas del blog).
Ya en los años 50-60, con la guerrilla ya liquidada y exterminada por la feroz represión franquista de finales de los 40, suponemos alguna vez transitaría a caballo por esta zona el médico José Fernández Martínez, médico de Porto en esos años y natural de Lubián (de la familia de "Los Cancelo"). Este médico, que ejerció su labor profesional en estas sierras, años mas tarde ya marchó a vivir a la zona de Toro (Zamora).
Durante meses también anduvo escondido por estos montes el practicante Manuel Alonso San Román, vecino de Vilavella  y huido a la montaña de Barxacoba al iniciarse el golpe de estado de julio del 36. Estaba acusado de ser "marxista, comunista y del Frente Popular". Fue capturado en 1938, y condenado a 9 años de prisión además de ser sometido a multas y expedientado por responsabilidades políticas. Uno de sus hijos fue luego médico y destacado militante socialista (llega a ser senador por Zamora), Manuel Alonso Novo (1934-2010). Este Dr. Alonso, al cual tuvimos la oportunidad de conocer personalmente, nos hizo llegar algunos relatos e historias de los años de la guerra en la zona (un día las daremos a conocer).
De todos ellos tuvimos recuerdos e imágenes en esa mañana de junio mientras recorríamos estos agrestes paisajes, rotos en su belleza por los "bosques" de parques eólicos. Estos "molinos" que parece que crecen cada día un poco mas en la línea del horizonte de estas montañas, poco a poco van sustituyendo en el paisaje a los "curros" y chozos (esa tecnología-arquitectura ligada a la actividad ganadera que fue la preponderante en estos lugares hasta hace bien poco). 


Planaltos en las montañas de la zona de Barxacoba(Zamora), junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)

Alto de Cruz de la Mata y Pedra do Bedul-. A 1688 m  de altura. Planaltos en las montañas de la zona de este-noreste de  Barxacoba(Zamora), junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)

Planalto de  Pedra do Bedul-. A 1688 m  de altura. Planaltos en las montañas de la zona de Barxacoba camino de Valdesirgas (Zamora), junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)

 A 1688 m  de altura. Planaltos en las montañas de la zona al este-noreste de Barxacoba (Zamora), junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)

En primer término un antiguo curro de ganado en la ladera de Cruz de la Mata mirando hacia el sur, hacia Portugal y la portilla da Canda. Al fondo varios "bosques" de eólicos (a la izda. los de al Norte por encima de Lubián) y el de la derecha esta al Este de Pías. Montañas de la zona de Lubián, Pías y  Barxacoba (Zamora), junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)

En primer término un antiguo curro de ganado en la ladera de Cruz de la Mata. Al fondo montañas hacia la zona de Valdesrigas y Penña Trevinca..con línea de horizonte limpio, sin eólicos (aún). Montañas de la zona al este-noreste de Barxacoba (Zamora), junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)

En la ladera de Cruz de la Mata. Al fondo eólicos encima de Pías.. Montañas de la zona de ´Pías y Barxacoba (Zamora), junio de 2014.  (Archivo Diario de un médico de guardia)
Desde el alto de Aguallal (1666m) vista hacia el Norte, Planaltos en las montañas de la zona de Barxacoba camino de Val (Zamora),- A la derecha parques eolicos de la zona al Norte de Lubián colonizando las sierras.  junio de 2014  (Archivo Diario de un médico de guardia)Añadir leyenda